Este es el tiempo ideal de una ducha según la OMS

Este es el tiempo ideal de una ducha según la OMS

Ducharnos es algo que forma parte de nuestra rutina diaria, así que hay muchísimas cosas que tenemos interiorizadas y que nos resulta complicado cambiar. Algunas de ellas ni siquiera nos las hemos planteado, como por ejemplo cuál es el tiempo ideal que debe durar una ducha. Por lo general, no solemos controlar el tiempo que estamos en la ducha, y es un gran error.

El tiempo ideal de una ducha

La Organización Mundial de la Salud (OMS) responde a la pregunta de cuánto tiempo debemos tardar en ducharnos: cuatro minutos, suficientes para limpiar la piel en profundidad y, al mismo tiempo, cuidar el medio ambiente. Una ducha de cuatro minutos conlleva un consumo de agua de 80 litros, nada más y nada menos.

Darnos una ducha larga y de agua caliente puede parecer la mejor forma de mimarnos en invierno, pero lo cierto es que solo vamos a conseguir deshidratar la piel. Cuando la ducha dura más de cuatro minutos, se eliminan los aceites naturales de la piel y, además, se abren los poros, haciendo que la humedad se escape.

Los mejores consejos para una buena ducha

La recomendación de los expertos es ducharse con el agua a una temperatura de entre 35 y 37 grados, la misma que la temperatura corporal. El agua caliente elimina los aceites naturales de la piel, dejándola seca y vulnerable ante las agresiones externas.

Los últimos segundos de la ducha, podemos utilizarlos para pasar un chorro de agua fría por todo el cuerpo. Esto activará la circulación sanguínea, fortalecerá el sistema inmunitario y aliviará las piernas cansadas.

Aunque casi todos la utilizamos, el uso de la esponja podría tener el efecto contrario al deseado. Y es que, si no se limpian de forma adecuada, se convierten en el ambiente perfecto para la proliferación de hongos y bacterias. Por lo tanto, lo mejor es aplicar el gel con la mano.

Hay quienes creen que como el agua con jabón pasa por el plato de ducha es suficiente para limpiar los pies, pero no es así. Al igual que el resto del cuerpo, tenemos que frotarlos bien para eliminar toda la suciedad, piel muerta y bacterias acumuladas.

Una vez fuera de la ducha, debemos utilizamos la toalla con delicadeza para secarnos. En lugar de frotar, lo mejor es secar la piel con pequeños toques. Luego, nos aplicamos una buena crema o loción hidratante corporal, y ya estamos listos.

¡Este es el tiempo ideal de una ducha según la OMS!

Janire

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